¿Has ido alguna vez a algún campamento de verano cuando eras un niño? Si la respuesta es que sí, entonces sabrás la inolvidable experiencia que supone, además de lo educativo y gratificante que puede ser. Si quieres que este verano sea diferente para tus hijos, no lo dudes, los campamentos de verano en Asturias son una opción perfecta para pasar un verano diferente y superdivertido. Te contamos por qué.
Ventajas de los campamentos de verano
Las ventajas de estos lugares son innumerables. Te presentamos algunas de ellas para que termines de decidirte:
Fomento de la convivencia y la tolerancia
Los niños salen de su núcleo familiar para integrarse en un grupo de convivencia, con compañeros de su misma edad. Esto les obliga a entablar relaciones y socializar con otras personas que no son las habituales de su círculo, algo que resulta muy positivo para ellos y el desarrollo de su independencia.
No debes preocuparte de nada, estarán atendidos como si estuvieran en su propia casa, pero sin ser el centro de atención. Esto les enseñará el valor de compartir, conocer nuevas personas e integrarse en un grupo de iguales
Adquisición de habilidades sociales
Uno de los pilares fundamentales en los que se basan estos campamentos, es poner en valor la relación de grupo y la convivencia. Gracias a las numerosas actividades que se realizan, poco a poco, los niños van tomando conciencia de ese sentimiento de pertenencia y forjando nuevas amistades que pueden llegar a ser muy duraderas. Realmente, se trata de una excelente forma de crecimiento personal y de autoconocimiento, muy positiva para el desarrollo de su personalidad.
El contacto con la naturaleza fomenta el respeto y amor por la misma
Hoy en día, los niños ya no se educan como hace unos años, ni juegan a los mismos juegos al aire libre, especialmente desde la aparición de los móviles, tablets, ordenadores y demás dispositivos electrónicos. Por eso, que tengan un contacto estrecho con la naturaleza es muy importante para que aprendan a valorarla y a respetarla.
En este sentido, los campamentos de verano incentivan ese contacto, además del ejercicio físico, a través de los numerosos juegos que se organizan durante el día. Correr, escalar, saltar y jugar al aire libre, no solo es bueno para su desarrollo físico, sino también psicológico y emocional. Los hace sentir más libres y más felices y olvidar durante un tiempo las pantallas.
Como ves, los campamentos de verano en Asturias son una experiencia maravillosa y enriquecedora para cualquier niño. De aquí se llevarán hermosos recuerdos y seguro que querrán repetir. En NHorte lo tenemos claro y, por eso, cada año nos esforzamos para que la experiencia sea todo un éxito y tanto niños como padres queden encantados. ¡Os esperamos!
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